miércoles, 23 de marzo de 2016

Facebook no me basta - No a la violencia

Esta mañana me he despertado con terribles noticias. Las hay todos los días, por desgracia. Estas me han afectado más.
Ha ocurrido en Bruselas, donde viven algunxs amigxs y donde yo mismo viví durante unos años. En el aeropuerto de Zaventem y la estación de metro de Maelbeek por los que he pasado muchas veces.
He recordado los atentados de Madrid, y la estación de Atocha por la que cada día pasaba de camino a la universidad.
Me he acercado al monumento-homenaje a las víctimas del 11-M. En su interior, la primera frase dice: "Hace falta mucha fantasía para soportar la realidad." (en mi opinión, hace falta un poco de amor para cambiarla).
Aquel 11 de marzo, y los días siguientes, no dejaron de resonar en mi unas palabras de Domingo durante el taller de teatro que me han acompañado desde entonces: "En estos momentos es cuando tenemos que ser más payasos." La risa que nos quitan las desgracias diarias es el antídoto contra la desesperación, el mal, la impotencia.
Tampoco el amor está nada mal, contra la violencia, el odio, la venganza.
Me entristece pensar (y ver) que la respuesta a los atentados es el bombardeo o que los atentados son respuesta a bombardeos... En general la espiral de violencia que vivimos y que se transmite ya desde el lenguaje político. Enfrentar a la propia la imagen del otro, del bárbaro, del extranjero y reforzar la identidad desde el odio y la separación.
Y que eso llegue a la calle; por ejemplo, al salir de casa me ha dicho mi vecina "¿Te has enterado de lo de Bruselas? ¡Qué hijos de puta!"
No sé cuál es la respuesta, (pero sé cuál no lo es). Me importan más las preguntas ¿por qué el terrorismo? ¿por qué la guerra? ¿por qué la violencia? Y sobre todo la actitud. Una actitud de apoyo y solidaridad con las víctimas, de amor, de ayuda para devolver la risa. Y que la risa no deje escuchar el discurso del odio.